Según una antiquísima tradición, esta es una noche de vela en honor del Señor, y la Vigilia que tiene lugar en la misma, conmemorando la Noche Santa en la que el Señor resucitó, ha de considerarse como «la madre de todas las Santas Vigilias» (san Agustín).
Esta vigilia es figura de la Pascua auténtica de Cristo, de la noche de la verdadera liberación, en la cual, «rotas las cadenas de la muerte, Cristo asciende victorioso del abismo» (Pregón pascual).
Noche de escucha y oración en espera de la Resurrección de Cristo. Es la noche de estar en vela con las lámparas encendidas en las manos en espera del Señor. Es la noche de las noches. Es la Vigilia de las vigilias. La Vigilia pascual es rica en contenido,en signos y en símbolos. La Iglesia comunica a los fieles toda
la riqueza y vivencia de esta gran solemnidad. Celebramos la Resurrección del Señor, el triunfo de la vida sobre la muerte, la victoria de la luz sobre las tinieblas.
La
celebración litúrgica consta de las siguientes partes:
1. Lucernario: Bendición del fuego, procesión y pregón pascual.
2. Vigilia: La Iglesia proclama y medita las maravillas que Dios ha hecho en favor de su pueblo.
3. Liturgia bautismal: Se incorporan a la Iglesia nuevos miembros por los sacramentos de la iniciación cristiana. Los católicos renuevan su compromiso bautismal.
4. Liturgia eucarística: Es la Eucaristía más importante de todo el Año litúrgico.
Por motivos de orden pastoral puede reducirse el número de lecturas del Antiguo Testamento: léanse al menos tres, que en casos muy especiales pueden reducirse a dos, sin omitir nunca la lectura del capítulo 14 del Éxodo (3ª lect.):
Las lecturas de la Sagrada Escritura describen momentos culminantes de la historia de la salvación, cuya meditación se facilita a los fieles con el canto del salmo responsorial, el silencio y la oración del sacerdote celebrante. Se proponen siete lecturas del Antiguo Testamento, entresacadas de la Ley y de los Profetas, y dos del Nuevo Testamento: de la lectura del Apóstol y Evangelio. De esta manera, la Iglesia, «comenzando por Moisés y siguiendo por los Profetas» (Lc 24, 26; cf. Lc 24, 44-45), interpreta el Misterio Pascual de Cristo.
Toda la celebración de la Vigilia Pascual debe hacerse durante la noche. Por ello no debe escogerse ni una hora tan temprana que la Vigilia empiece antes del inicio de la noche, ni tan tardía que concluya después del alba del domingo. Esta regla ha de ser interpretada estrictamente. Cualquier costumbre o abuso contrarios han de ser reprobados. Aunque se celebre antes de la medianoche,
ya es Misa de la Pascua del Domingo de Resurrección.
El
Cirio Pascual se coloca hasta el Domingo de Pentecostés, inclusive, junto al altar o junto al ambón.
El
Pregón pascual, magnífico poema lírico que presenta el Misterio Pascual en el conjunto de la economía de la salvación, puede ser anunciado, si fuese necesario por falta de un diácono o por imposibilidad del sacerdote celebrante, por un cantor o lector.
En nuestra Parroquia, la
Vigilia Pascua Señor es a las 23:30 horas del Sábado Santo en la Iglesia Mayor.
(Fuente: C.E. de España)
Aplicación para seguir la liturgia:
iBreviary Pro Terra Sancta
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